martes, 20 de julio de 2021

Solemnidad de Santiago el Mayor. 25/07/2021. Mateo 20, 20-28

    Hoy, domingo, celebramos la fiesta de Santiago apóstol patrono de España. Este año celebramos el Año Santo Compostelano ya que cae el domingo el día de Santiago. Es un día grande para los españoles creyentes. Santiago debe ser uno de nuestros modelos como verdaderos creyentes en Cristo. En la sociedad hay muchos que no desean que los creyentes hablemos y enseñemos en nombre de Cristo, como en tiempos de Santiago sucedía en Jerusalén. Y en cuanto puedan nos lo prohibirán. Pero, nosotros seguiremos en un mismo espíritu con nuestras reuniones y nuestra unión con Cristo en la Eucaristía. Los cristianos tenemos muy claro que debemos obedecer a Dios antes que a los hombres. Nosotros procuramos respetar a todo el mundo y agradeceríamos que también a nosotros se nos respetara. Con estas reflexiones considero explicada y aprovechada la primera lectura de la misa de hoy, Hechos 4,33;5,12.27-33;12,2.


   Repitamos durante el día, del salmo 66, 2-8: "Oh Dios, que te alaben los pueblos, que todos los pueblos te alaben".


   La segunda lectura es Corintios 4, 7-15. Es la vida de los cristianos perseguidos por ser discípulos de Cristo. Realmente, es un complemento de la primera lectura. Cuando damos nuestra vida por ser fieles a Cristo, estamos manifestando que, a pesar de que nuestra fe está en vasijas de barro, Dios inyecta en nosotros una fuerza extraordinaria que nos hace capaces de serle fieles y entregar nuestra vida.


   La tercera lectura se toma del evangelio de San Mateo 20, 20-28. Se trata de una madre que sólo piensa en sus hijos. Se acerca a Jesús y le pide que ordene, nada menos ¡Qué ordene!. Que ordene que sus hijos se sienten uno a su derecha y el otro a su izquierda, ¡nade menos!


   A menudo, la persecución o la causa de la misma no proviene de los otros. A veces está en nosotros mismos. Dentro de la misma Iglesia. Nos movemos por nuestros mismos intereses y entonces entran los egoismos y vuela, se marcha, el espíritu de ayuda a los demás. Es muy difícil tener esa limpieza de espíritu, esa entrega a los demás. Es muy difícil ser cristiano como verdadero discípulo de Cristo. Pero, existe el milagro. Para Dios no hay nada imposible. Somos creación suya no sólo como personas, hombre o mujer, sino también como discípulos suyos. Nos lo dice muy bien la segunda lectura, la segunda Carta a los Corintios 4, 7-15. Nos dice que lllevamos ese tesoro "en vasijas de barro, para que se vea que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no proviene de nosotros". Somos creados en dos veces, una como seres humanos y otra como cristianos. Demos gracias a Dios y seámosle fieles de verdad.


   No nos olvidemos de hacer un propósito a propósito de esta lectura.

 
Licencia de Creative Commons
Teología Ovetense by longoria is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-SinObraDerivada 3.0 Unported License.